Cátedra Raúl Porras Barrenechea

Blog-Homenaje a la memoria de Raúl Porras Barrenechea,
Historiador y Profesor de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos

28 noviembre 2007

Porras tiene una sala en la BN (*)

Por Abelardo Oquendo

Buen número el que acaba de dar a la luz Libros & Artes. Números, habría que decir, pues se trata de dos en uno: 22 y 23 de su año VI. El material que reúne es en su mayor parte diverso y en la menor se organiza en torno a dos ejes: uno, Nabokov, con artículos de Alonso Cueto y Peter Elmore, e Ingmar Bergman el otro, contenido en un cuerpo aparte, un suplemento a cargo de Federico de Cárdenas.

En su parte central, o mayor, todos los trabajos tratan temas vinculados al país. A la propia entidad editora inclusive uno de ellos, de que celebra la inauguración reciente, en el nuevo local de la Biblioteca Nacional, de la "Sala del escritor" que lleva el nombre de Raúl Porras Barrenechea. Porras donó más de 17,000 libros a la BN, pero esta sala más que una expresión de gratitud es un debido homenaje a un gran historiador, a un maestro universitario excepcional y a uno de los mejores prosistas de las letras peruanas.

En el encabezamiento del texto que se titula "Raúl Porras Barrenechea: itinerario vital", se reproducen estas palabras de Porras: "Mi experiencia de profesor me dice que no hay laboratorio ni templo que supere a la clase de Historia para la forja del espíritu de nacionalidad. En la clase de historia de la patria el silencio se hace solo, sin disciplinas ni castigos, por la sola presencia de las sombras heroicas que surgen del pasado, por el relato que aprieta el corazón de los niños con la emoción del triunfo o el dolor de la patria, del error que se pudo evitar". La experiencia diaria de los profesores de historia y ¡ay! de los alumnos, podría negar las palabras citadas. No porque mientan, sino porque, desventuradamente, no existen muchos profesores, como Porras, capaces de conmover con su sabiduría, su sensibilidad y su inteligencia a sus oyentes, de hacerles llegar al corazón los triunfos de la patria o el dolor por los errores que se pudo evitar. Por idealismo o por modestia, Porras parece imaginar a todos desempeñándose como él.

De Alberto Flores Galindo, otro historiador paradigmático, se publica aquí el ensayo preliminar en el cual volcó las conclusiones primeras de los estudios que, antes de morir, emprendió acerca de José María Arguedas. Los otros textos principales son de Marco Martos (sobre Belli), de Edgardo Rivera Martínez (sobre Estuardo Núñez), de Antonio Cisneros (sobre Hastings). Y hay notas sobre libros recientes, pero no muchas si se considera que es una revista de la Biblioteca Nacional.


(*) Publicado en el diario La República, 27 de noviembre de 2007.

El Reportero de la Historia, 8:16 a. m.